Corrupción en México

Lic.Criminología Diego Chaparro Hernández 

La corrupción según la SFP consiste en el abuso del poder para beneficio propio. En México la corrupción ha llegado a niveles alarmantes, pero no es algo nuevo, en 2017 Transparencia Internacional (TI), que en su informe “Las personas y la corrupción: América Latina y el Caribe”, otorga la primera posición a México en el rubro del mayor porcentaje de la población que ha tenido que pagar un soborno para acceder a un servicio público en los 12 meses previos a la consulta, que se realizó a 22,000 ciudadanos de 20 países de la región. 

México ocupa el primer lugar con 51% de los encuestados que afirmaron el pago de soborno a un funcionario público. 

Pero ahora se verán datos que para (TI) son factores que resaltan en el tema de la corrupción, según datos del -El Economista- México cuenta con 4 jueces por cada 100,000 habitantes. En América Latina ocupa la posición más baja: en la región se promedian 8 jueces por cada 100,000 habitantes. El promedio de inversión del PIB en justicia y seguridad de los países de la OCDE es de 4 puntos porcentuales. México invierte sólo 1 punto del Producto Interno Bruto. En el Índice Global de Impunidad del 2017, el país se situó en el lugar 66 de 69, posición que lo coloca entre los países en que la impunidad prevalece. 

La corrupción costó al país 10 puntos del PIB. Según el mismo informe de (TI) los servicios donde se propicia la corrupción son: hospitales públicos, escuelas públicas, trámites de documentos de identidad, policía, servicios públicos como el agua potable y los tribunales del sistema judicial. Según estadísticas muy fuertes es que 3 de cada 10 denunciantes por corrupción sufren represalias, y 1 de cada 10 personas en América Latina denuncia estos actos, son bajísimos los niveles de denuncia ante estos actos. Reducir la corrupción es una condición clave para una sociedad justa y equitativa, y combatirla eficazmente fortalece las iniciativas de desarrollo, la promoción de derechos humanos y libertades y la erradicación de la pobreza global. 

Queda claro que existen muchos procedimientos, leyes, protocolos, innecesarios que provocan dichos actos de corrupción. Y no me refiero a que no existan, sino que se  reformulen, que la gente tome conciencia de ello y vea que es un problema muy grande para el país. Debemos de incentivar como criminólogos la creación de programas de prevención sobre este gran problema que daña al país y como sociedad debemos dejar de hacer uso de esas malas prácticas mejor conocidas como mordidas o moches que tanto perjudican al país. Decía tácito: "Cuanto más corrupto es el estado, más leyes tiene".


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