Por: Alfredo De Jesús Patricio
«La educación no cambia el mundo, cambia a las personas que van a cambiar el mundo» Paulo Freire
México tiene un total de 39 millones de niños, niñas y adolescentes (Inegi).
51.1% están en situación de pobreza. 9 de cada 10 niños y niñas que hablan alguna lengua indígena son pobres.
33.2% de los niños entre 6 y 11 años tienen obesidad y sobrepeso. México ocupa el primer lugar en obesidad infantil en todo el mundo.
80% de los niños no alcanzan los conocimientos requeridos en su nivel educativo. Más de 4 millones de niños, niñas y adolescentes están fuera de la escuela.
20% de los niños y niñas entre 0 y 5 años no tienen un desarrollo adecuado para su edad. 65% de los niños, niñas y adolescentes están fuera de la escuela.
60% de los niños de 1 a 14 años han experimentado algún método violento de disciplina. 8 de cada 10 agresiones contra niñas, niños y adolescentes se dan en la escuela y la vía pública (unicef, 2017) .
Erradicar el castigo físico y psicológico no significa erradicar la autoridad de las madres y
padres ni de los maestros, sino desvincularla de la violencia, en este sentido tampoco debe de existir ningún tipo de violencia en la escuela, no perdamos de vista que muchos niños, niñas y adolescentes, la escuela es el único lugar seguro.
Lo que se debe de evitar o erradicar:
Si un niño vive con violencia, aprende a dar violencia.
Si un niño vive en el ridículo, se vuelve tímido.
Si un niño vive avergonzado, acaba por sentirse culpable.
Si un niño vive en la descalificación, aprende a condenar.
Lo que se debe de hacer:
Si un niño vive en la tolerancia, aprende a ser paciente.
Si un niño vive estimulado, aprende a ser proactivo.
Si un niño vive con equidad, aprende a ser justo.
Si un niño vive en seguridad, aprende a confiar en sí mismo.
Si un niño vive con aprobación, aprende a quererse a sí mismo.
Si un niño vive con aceptación y armonía, aprende a encontrar el amor en el mundo.
“EDUCA SIN GOLPES”
El castigo físico es una forma equivocada de educar. No se trata de sustituir el castigo físico
por el maltrato psicológico, sino de educar sin violencia. Por otra parte, ya tienen suficientes
problemas los niños, niñas con sus pares, como para que los padres o madres y la sociedad ejerzan más violencia.
Los niños y niñas necesitan: Atención, Amor, Cuidado, Confianza, Seguridad, Respeto,
Protección, Seguridad. Necesitan ser escuchados, necesitan un hogar, una escuela libre de
todo tipo de violencia, necesitan una familia que los apoye y empuje a cumplir sus sueños,
necesitan unos maestros que los guíen y orienten con sus enseñanzas a cumplir sus
objetivos.
Recuerde que la violencia se engendra, justifica y se replica.
“No importa si la violencia contra los niños y niñas tiene lugar en la familia, la escuela, la comunidad, una institución o el lugar de trabajo, los trabajadores de la salud ocupan el primer lugar en la respuesta a ella. Debemos hacer nuestro aporte para asegurar que se evite que dicha violencia tenga lugar y cuando tiene lugar, garantizar que los niños y niñas reciban los mejores servicios para reducir sus efectos perjudiciales.”
Dr. Anders Nordström, Director General Encargado, OMS
Referencias
inegi. (s.f.). inegi. Obtenido de inegi:
http://internet.contenidos.inegi.org.mx/contenidos/productos/prod_serv/contenidos/espanol/bvinegi/productos/nueva_estruc/702825078966.pdf
unicef. (2017). unicef. Obtenido de unicef: https://www.unicef.org.mx/Informe2017/Informe-Anual-2017.pdf
unicef. (s.f.). unicef. Obtenido de unicef:
https://www.unicef.org/mexico/spanish/Informe_Mundial_Sobre_Violencia.pdf
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